El portal del Public Policy Institute of California publicó el pasado 5 de diciembre el informe titulado “Valorando la disponibilidad de agua para recarga en el Central Valley” elaborado por Ellen Hanak, Greg Gartrell y Spencer Cole.

A continuación, se presentan en español los primeros párrafos y las conclusiones de este estudio:

La recarga de los volúmenes adicionales de agua resultantes de las grandes tormentas registradas en invierno y primavera en los acuíferos de California es una poderosa herramienta para reducir la sobreexplotación de acuíferos, mejorar la prevención ante futuras sequías, y limitar los riesgos de inundaciones en las poblaciones situadas aguas abajo. El año notablemente húmedo de 2023 ha sido testigo de considerables avances en este campo. El Estado facilitó la recarga de caudales de inundación mediante nuevos decretos y legislación (SB 122), y numerosos programas locales pudieron incorporar mayores volúmenes de agua en los acuíferos. En las zonas semi-áridas del Valle de San Joaquín, nuestro reciente estudio permitió constatar que la recarga había aumentado un 17 % desde 2017, otro año muy húmedo.

A medida que nos adentramos en otra estación lluviosa, todos los partícipes en estas iniciativas están tratando de valorar una cuestión fundamental: cómo continuar con estos éxitos, asegurando a la vez que los ríos disponen de caudales de agua suficientes para proteger el medio ambiente y los derechos de los usuarios situados aguas abajo. Como tantos otros temas en el sector del agua en California, la respuesta a esta pregunta es complicada. En este informe analizamos con detalle varios de los temas relevantes en el Central Valley – la principal fuente de agua para recarga en California – y destacamos la forma en que las asociaciones de partícipes podrían conseguir el mayor beneficio del agua disponible.

El análisis realizado ofrece varias importantes conclusiones sobre cómo mejorar las políticas de recarga de acuíferos:

  1. Las contrapartidas entre captaciones en zonas aguas arriba y transferencias de agua pueden ser significativas, especialmente cuando se trata de captaciones en las partes altas de la cuenca del río San Joaquín.
  2. El hecho de que las transferencias de agua no alcancen toda su capacidad durante los años húmedos genera mayores oportunidades para la recarga.
  3. Es necesaria una mayor flexibilidad para las captaciones de aguas de inundación en zonas aguas arriba.
  4. Las actualizaciones de la reglamentación ambiental del Delta no cambiarán la situación general de este tema.
  5. Otras políticas estatales y locales pueden mejorar sustancialmente los beneficios del agua disponible.