ASERSA elaboró el pasado mes de marzo un informe titulado El Plan de Gestión de Riesgos, en razón del nuevo instrumento normativo incluido en el Reglamento de la UE para el riego agrícola con agua regenerada.
La elaboración de ese informe fue una iniciativa de ASERSA, en su condición de socio del Proyecto SuWaNu Europe, con el propósito de promover, entre todos los socios del proyecto y el sector de la reutilización del agua, un conocimiento detallado de las implicaciones técnicas que introducía esta novedosa exigencia normativa del Reglamento europeo en proceso de elaboración de esos momentos: la necesidad de elaborar e implantar un Plan de Gestión de Riesgos (PGR).
El objetivo del informe es analizar uno de los requisitos normativos más novedosos incluidos en la propuesta de Reglamento europeo disponible en ese momento, en concreto el relativo a la necesidad de incorporar un Plan de Gestión de Riesgos en los proyectos de uso de agua regenerada para riego agrícola que se lleven a cabo en los Estados Miembros (EM) de la UE en el futuro. El informe incluye referencias a otras recomendaciones y normativas sobre la gestión de riesgos, elaboradas por instituciones dedicadas a la protección de la salud pública, como la Organización Mundial de la Salud, y organismos públicos de estados líderes en la reutilización del agua.
Como complemento al análisis de los contenidos normativos del Reglamento, el informe incluye tres secciones elaboradas por ASERSA en las que se presenta la experiencia del sector de la reutilización del agua, un resumen final y el papel que juega y puede jugar la reutilización del agua en la economía circular.
Aunque el documento normativo de referencia utilizado en ese informe fue la propuesta de Reglamento publicada por el Consejo Europeo en diciembre 2019, la circunstancia de que las posteriores tramitaciones por parte del Consejo y el Parlamento europeos no hayan introducido modificaciones en dicha propuesta hace que las reflexiones contenidas en el informe sean aplicables al texto del Reglamento que acaba de ser publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea, el 5 de junio de 2020.
Tenemos previsto proceder, durante las próximas semanas, a la traducción al inglés del texto de ese informe, incorporando las referencias técnicas del Reglamento recién publicado en el Boletín Oficial de la Unión Europea.