La WateReuse California y la Southern California Salinity Coalition (SCSC) anunciaron el pasado 13 de febrero la publicación de un Libro Blanco titulado “Consideración del lavado salino durante la aplicación de agua regenerada para riego de jardinería” publicado ese mismo mes. El Libro Blanco puede descargarse de la página web de la SCSC o bien directamente de la página web de Asersa.
Este Libro Blanco fue diseñado con el objetivo de proporcionar orientación científica al Departamento de Recursos Hídricos (DWR) del estado sobre la forma de determinar cuánta agua regenerada debe utilizarse para riego de jardinería, asegurando que se reducen los efectos negativos que la salinidad puede causar en la salud de las plantas y el suelo. Los autores del Libro Blanco son el Dr. Amir Haghverdi y el Dr. Laosheng Wu, ambos de la Universidad de California en Riverside.
En palabras de la directora de WateReuse California “el Libro Blanco es una herramienta importante para determinar las políticas que deben adoptar las poblaciones del estado, incluyendo aquellas que recurren al agua regenerada para mantener unos espacios ornamentales saludables”. La WateReuse California es una organización dedicada a la promoción del cuidado responsable de los recursos hídricos del estado, mediante el mayor uso posible del agua regenerada de forma segura, práctica y eficiente.
En palabras del presidente de la SCSC, una organización sin ánimo de lucro dedicada a la gestión de la salinidad en los abastecimientos de agua del sur de California, “es una satisfacción para la SCSC colaborar con la WateReuse California en la producción de este Libro Blanco destinado al DWR. Este tema es importante tanto para aquellas agencias integradas en la SCSC como para otros sectores interesados de todo el estado que deben afrontar los retos derivados de altas concentraciones de sales, tanto en las fuentes convencionales de agua como en las aguas regeneradas.
California ha venido utilizando agua regenerada de muy diversas formas durante más de 100 años. El agua regenerada que se aplica al riego de jardinería suele tener una salinidad superior a la del agua de consumo humano. Estas sales pueden consecuentemente acumularse en el suelo, a menos que se aplique un volumen adicional de agua para arrastrarlas (lavarlas) fuera del suelo. En ausencia de ese lavado, el exceso de sales puede afectar la salud de las plantas, causando una parálisis del crecimiento, flacidez en las hojas y otros daños. La aplicación de agua para el lavado del exceso de sales acumulado en la zona radicular es la práctica más aceptada para evitar esa posible acumulación y mantener un equilibrio.
Recientemente, el DWR inició un proceso de remodelación de la ordenanza del MWELO de 2015 relativa al modelo de cálculo de la eficiencia del agua de jardinería, en el que se establecen las normas mínimas para regular el diseño y las instalaciones ornamentales en el estado. MWELO incluye un protocolo de cálculo que permite a los usuarios de agua regenerada la aplicación de una cantidad adicional de agua de riego, más allá de la que sería necesaria si se utilizara agua de consumo humano, para el riego de jardinería; no obstante, no tiene en cuenta totalmente las variaciones naturales que afectan a la salinidad del agua utilizada para regar. En consecuencia, la asignación de agua así calculada puede ser insuficiente para proteger las plantas sensibles a la salinidad, tales como el césped, cuando se utiliza agua regenerada con un alto contenido salino.
El DWR tiene previsto completar la actualización del MWELO durante 2018. Con objeto de ofrecer una información más completa con la que realizar ese proceso, y basándose en la información ofrecida por varias de sus agencias, la SCSC y la WateReuse California patrocinaron el desarrollo del Libro Blanco con el que proporcionar una valoración científica de las sales adicionales frecuentemente presentes en el agua regenerada. El Libro Blanco propone la inclusión de una ecuación alternativa a la utilizada actualmente por el MWELO para estimar el volumen de agua permisible, en aquellos casos en que la fuente de agua afluente a una instalación de producción de agua regenerada muestra unas altas concentraciones salinas.
En palabras del Director Administrativo de la SCSC “el Libro Blanco propone una solución científica con la que asegurar el mantenimiento de la vitalidad de la comunidad ornamental y las instalaciones recreativas que dependen de un agua regenerada para regar. Las investigaciones del Dr. Haghverdi y el Dr. Wu demuestran que un ajuste de la fórmula del uso eficiente de agua propuesta por el MWELO, destinada a tener en cuenta la fuente de agua salina y los requisitos fisiológicos conocidos para asegurar una zona radicular saludable, puede alcanzarse en el marco del actual modelo MWELO, de una manera coherente con sus objetivos normativos”.