El Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTC) con base en Molina de Segura y la empresa privada del sector químico Destilerías Muñoz Gálvez, S.A. (MUGASA), participan en un proyecto europeo valorado en más de 1.688.000 euros que permite reutilizar en la industria aguas residuales complejas de tratar.
Utilizan energías renovables, cuyos resultados se prevé que logren hasta un 95 por ciento de reutilización del agua tratada mediante la eliminación del 100% de los sólidos que pudiera contener y la drástica reducción de los contaminantes orgánicos disueltos, «lo cual es un gran avance tecnológico tanto para las industrias del sector químico como para algunos subsectores del sector agroalimentario, situando a la Región de Murcia a la cabeza en tecnologías de tratamiento de aguas», explica Scribae en comunicado.
Utilizan energías renovables, cuyos resultados se prevé que logren hasta un 95 por ciento de reutilización del agua tratada
Del montante total del presupuesto, mas de 800.000 euros llegan a Murcia directamente desde la UE a modo de ayuda para realizar el proyecto, «todo ello con el objetivo de desarrollar los niveles de producción industrial paralelamente a la mejora de la gestión hídrica y la reducción de la Huella de Carbono», ya que los resultados del proyecto suponen «una importante reducción del consumo de agua y de sus costes asociados», disminuyendo a su vez la emisión de gases de efecto invernadero.
Así pues, esta iniciativa tecnológica desarrollada en una planta piloto que será instalada al efecto en MUGASA, que participa como coordinadora del proyecto, propone una combinación de tecnologías, consideradas como mejores técnicas disponibles por la UE, aplicadas al tratamiento de aguas residuales y difíciles de tratar, cuya finalidad es dejar el agua en condiciones de ser reutilizada en fábrica.
Para el doctor Miguel Ayuso, investigador del CTC y responsable de comunicación del proyecto, «hasta ahora, las valoraciones del proyecto están siendo muy positivas, ya que la reutilización de aguas residuales regeneradas reduce la demanda de agua potable y descarga de efluentes industriales contaminados al medio ambiente, calificándose los resultados como muy valiosos para los sectores químico y agroalimentario».
Técnica y transferencia de tecnología
La tecnología empleada, que asegura la eliminación del 100% de los sólidos en suspensión y la drástica reducción de los contaminantes orgánicos disueltos, consiste en una combinación de técnicas de oxidación electroquímica, junto a fotocatálisis y filtración de membrana, todo ello aprovechando la energía solar, reduciendo así el estrés hídrico y la huella de carbono.
Este proyecto, que cuenta con la contribución del instrumento financiero LIFE+ de la UE, es desarrollado íntegramente en la Región de Murcia y apoya la transferencia de tecnología del proceso a las industrias que estén interesadas.