José Antonio Fayas, socio de Asersa, antiguo Director de Recursos Hídricos del Gobierno Balear y nativo de Menorca, viene impulsando de forma entusiasta y sistemática, en particular a través del Es Diari de Menorca, la conveniencia de replantearse la gestión del agua en la isla, incorporando una gestión integrada del acuífero de Migjorn entre todos sus beneficiarios y su recarga planificada con agua regenerada. Los trabajos recopilatorios elaborados por José Antonio Fayas indican que el acuífero de Migjorn se extiende bajo el 55 % de la superficie de la isla, siendo el más importante de ella. Todos los abastecimientos de agua de los núcleos urbanos de la isla dependen de él, con la única excepción de las poblaciones de Mercadal y Fornells y algunas urbanizaciones de la costa norte. Actualmente soporta unas extracciones del orden de 19 hm3 anuales. La pluviometría registrada entre los años 1981 y 2000, un 12,8 % inferior a la media histórica, unida a un incremento de las extracciones, ocasionó un descenso medio de los niveles del agua de 6 m, motivando un importante avance de la intrusión marina y la consiguiente salinización del agua del acuífero en amplias zonas de Ciutadella y de Maó – Es Castell – Sant Lluís. Desde el año 2001 hasta el 2014, un aumento de las precipitaciones del 13,3 % superior a la media histórica, junto con una ligera disminución de las extracciones, ha favorecido la estabilización de los niveles del agua en el acuífero, evitando el incremento de la intrusión marina, salvo en algunos puntos. Mantener las extracciones actuales durante una secuencia de años predominantemente secos (como los de 1981 a 2000), causaría una disminución del flujo subterráneo al mar, provocando un descenso del nivel del agua en los pozos y un avance de la intrusión marina. Para evitar estos efectos perniciosos, sería necesario mantener el flujo subterráneo al mar, mediante una reducción de las extracciones de agua, lo que comportaría un déficit de recursos hídricos (unos 7 hm3/año) que debería ser compensado mediante otras fuentes de suministro. La recarga del acuífero de Migjorn con agua regenerada de gran calidad tendría múltiples beneficios, como una mejora ambiental de los ecosistemas marinos, un ascenso de los niveles del agua en los pozos, una regresión de la intrusión marina, una mejora de la calidad del agua, con menor contenido de cloruros y una rebaja de nitratos y otros contaminantes, por efecto de la dilución. En definitiva, se potenciaría una gestión integrada de los recursos hídricos, una actuación medioambientalmente muy positiva y una mayor garantía en la disponibilidad de recursos para los abastecimientos urbanos (permanentes y turísticos) y para los usos agropecuarios. Desde el punto de vista hidrogeológico, las zonas donde convendría plantearse preferentemente la recarga del acuífero de Migjorn son las plataformas de Ciutadella y de Maó – Es Castell – Sant Lluís, donde además se sitúan las mayores disponibilidades de producir agua regenerada.